La diligencia inició a las 3:20 de la madrugada del viernes y culminó dos horas después. Solo un crematorio se negó a incinerar su cadáver
El cadáver del terrorista Abimael Guzmán Reinoso fue incinerado la madrugada de este viernes 24 de septiembre a las 3:20 a.m. en un procedimiento reservado que se realizó en la sede del Hospital Centro Médico Naval del Callao, ubicado en la avenida Venezuela.
La diligencia, que culminó a las 5:30 a.m., contó con la presencia de un representante del Ministerio Público, así como la de los ministros de Justicia y Derechos Humanos, Aníbal Torres, ydel Interior, Juan Carrasco. Tal y como indica la ley, la dispersión de los restos cremados la realizará la cartera de Justicia, con apoyo del Ministerio del Interior, con tiempo y lugar de “naturaleza reservada”.
El destino final de los restos de Guzmán será catalogado como información secreta y de inteligencia, informó el Ministerio del Interior.
El cabecilla de la organización subversiva Sendero Luminoso falleció el sábado 11 de septiembre producto de una neumonía bilateral causada por un agente patológico, mientras cumplía condena de cadena perpetua en la Base Naval del Callao. Sus restos permanecían en la morgue del Callao a la espera de su destino final.
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La incineración del cuerpo del hombre que inició la época de terrorismo de los años ochenta en el país fue autorizada por la Ley 31352, promulgada el 17 de septiembre por el presidente Pedro Castillo. La norma agrega el artículo 112-A a la Ley General de Salud (26842), que establece la cremación de los cadáveres de reclusos condenados por traición a la patria y terrorismo.
Hoy se cumplen 29 años de la presentación de Guzmán a la prensa capturado en una jaula y con traje a rayas.
De acuerdo a ley, el último jueves, el Cuarto Despacho de la Tercera Fiscalía Provincial Penal Corporativa del Callao dispuso la incineración del cadáver de Abimael Guzmán. Esa misma noche, los ministros del Interior y Justicia, junto autoridades sanitarias y fiscalía, desarrollaron las últimas diligencias en la morgue del Callao antes de trasladar el cuerpo al crematorio.
Según comentó el ministro de Justicia, Aníbal Torres, solo uno de los numerosos crematorios limeños consultados rechazó hacerse cargo de la cremación del fallecido sentenciado por terrorismo. Por su parte, Ministerio del Interior informó que en las actas no se indicará dónde fueron dejadas para evitar posibles manifestaciones de los seguidores de Sendero Luminoso.
