El órgano público técnico enfocado en revisar los estudios de impacto ambiental mantuvo las observaciones sobre los posibles peligros al ecosistema en la Reserva Nacional de Paracas
El Servicio Nacional de Certificación Ambiental para las Inversiones Sostenibles (Senace) declaró infundada la apelación presentada por la empresa Terminal Portuario Paracas S.A. (TPParacas) contra la resolución de la institución que observó potenciales impactos ambientales en el transporte de minerales a través de la Reserva Nacional de Paracas.
En julio, el Senace desaprobó la modificación del estudio de impacto ambiental (MEIA) del proyecto Terminal Portuario General San Martín, en Pisco. La empresa apeló afirmando que se vulneraron los principios del procedimiento administrativo general, sin embargo, en esta resolución Senace rechazó los argumentos.
La decisión del órgano técnico adscrito al Ministerio del Ambiente se sustentó en los informes del Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp), el Organismo Nacional de Sanidad Pesquera (Sanipes) y la Autoridad Nacional del Agua (Ana) sobre el posible impacto de la actividad industrial al ecosistema de Paracas.
Lea también: La oportunidad que perdimos: Acuerdo de Escazú entra en vigencia.
La empresa Terminal Portuario Paracas S.A. no absolvió todas las observaciones hechas por el Senace. Por ejemplo, respecto a los vertimientos de aguas residuales industriales y domésticas tratadas, o las 6 observaciones relacionadas al estudio hidro-oceanográfico y al modelo para la evaluación del efecto del vertimiento del cuerpo receptor.
El organismo encargado de aprobar los estudios de impacto ambiental indica que, con esta resolución se agota toda vía administrativa de apelación por parte de la empresa Terminal Portuario Paracas S.A.
Puerto y proyecto
El Terminal Portuario General San Martín fue creado en 1969 y funciona como punto de embarque de granos, cereales y fertilizantes. En 2014, seis años antes que se declarara la Reserva Nacional Paracas, el TPParacas, de capitales españoles y brasileños, ganó la concesión para modernizar el puerto.
Lea también: Machu Picchu busca convertirse en el primer destino turístico libre de carbono en el mundo.
El proyecto tiene un presupuesto de S/. 100 millones, y consiste en construir dos plantas y un almacén de minerales, aspecto incluido posterior a su aprobación por el Gobierno peruano. Las dos plantas enfocadas en convertir agua de mar en agua potable y en el tratamiento de aguas residuales, y el almacén hermético para el manejo de cobre y zinc.
En la Reserva Nacional de Paracas habitan más de 216 especies de aves. En una zona reconocida a nivel mundial por su importancia biológica, incluso existe una iniciativa ciudadana para reconocerla como Patrimonio de la Humanidad ante la Unesco.