Racismo en Tai-loy: Historia de una detención arbitraria

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Racismo en Tai-loy: Historia de una detención arbitraria
Foto: Sofía Carrillo

En el año del Bicentenario una ciudadana afroperuana fue detenida, acusada de robar en la tienda de útiles pese a que el personal de la empresa no tenía pruebas

Indignante. Una ciudadana afroperuana denunció actos racistas en la tienda Tai-Loy de Barranco. A través de las redes sociales, el gestor cultural y hermano de la víctima, Luis Ernesto Mercado, informó que el último domingo en la tarde trabajadores de la empresa acusaron a Anaí Medrano, quien se encontraba en compañía de su hijo de 8 años, de robar en la tienda de útiles y la persiguieron por cuadras hasta que la policía la detuvo.

De acuerdo a Mercado, al retirarse Anaí junto a otros clientes del Tai-Loy ubicado en la avenida Miguel Grau, la alarma del establecimiento sonó y el agente la llamó para revisarla y al comprobar que no tenía nada le indicó que se podía retirar.

Cuando volvió a sonar el sensor a su salida, el vigilante le dijo que debía ser por las llaves que traía consigo. Empero, la administradora de la tienda, identificada como Laydi Karol Fernández Ramos, salió de su oficina gritando que “no la dejen salir, que ella es una ratera”, asegura Luis Mercado, miembro del colectivo Movimiento Negro Perú.

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Pese a mostrar la boleta del producto que llevaba consigo –una caja de plastilina-, continuaban acusándola con “calificativos racistas” y, debido al llanto y desesperación de su menor hijo, Anaí decidió retirarse de la tienda. Es ahí que el personal de Tai-Loy la persigue por 10 cuadras y, luego de llamar a la policía, la detiene en el parque Raimondi y, sin pruebas, la llevan a la comisaría donde permaneció más de tres horas, detalla Mercado.

El gestor cultural además denunció que, al llegar a la comisaría, no le permitieron conversar con su hermana y que, según relatos de Anaí, los policías la obligaron a desnudarse en un baño para comprobar que era inocente. Y que, en la patrulla camino a la sede policiaca “la insultaron” y acosaron pidiéndole “su número para que después salgan con ella en una cita porque es bien bonita”.

Pronunciamiento de Tai-Loy
Debido a los hechos, diversos activistas afroperuanos y ciudadanos indignados protestaron el lunes al mediodía en el frontis de la sede barranquina de Tai-Loy en rechazo a este acto de discriminación. Por su parte, a través de un comunicado oficial, la empresa con más de 56 años expresó que siempre ha rechazado todo tipo de discriminación y trato inadecuado a sus clientes; sin embargo, no reconoció los hechos ni pidió disculpas por el error.

“Debemos aclarar que nuestro personal actuó en cumplimiento de nuestros procedimientos, sin embargo, estamos investigando el caso en profundidad, y como siempre, estamos dispuestos a colaborar con la protección de los derechos de todas las personas y abiertos a brindar la información que resulte necesaria para esclarecer cualquier acto contrario”, manifestaron.

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Pica News tomó contacto con la sede central de la empresa para conocer cuáles son aquellos procedimientos que, según comunicaron, los trabajadores cumplieron a cabalidad, y conocer los indicios mínimos de la sospecha del “robo”. Sin embargo, solo nos informaron que el procedimiento y toda la información sobre el caso “ya se está llevando a cabo” por el “área legal que se encarga de hacer las validaciones respectivas”.

“Ello lo está viendo de manera interna el área legal y hará las aclaraciones respectivas cuando se lleve a cabo la resolución correspondiente”, precisaron. Asimismo, indicaron no contar con un área de comunicaciones responsable de declarar y que “Tai Loy ya emitió comunicado”.

Rechazo a la discriminación
Luis Ernesto Mercado, familiar de la víctima a la que no se le encontró nada hurtado, precisó que el lunes por la noche el propio jefe de seguridad de la tienda de útiles y juguetes aceptó que lo ocurrido en la sede Barranco fue “racismo, discriminación y que no son los protocolos de seguridad”. De igual forma, le comentó que “ya han tenido otros problemas con la misma administradora” y que sancionarán a los trabajadores.

Para “justificar” su discurso de conciliación, narra Mercado, el jefe de seguridad de Tai-Loy le indicó que es devoto de un santo y que ese santo es “mulato”. El también director de la compañía artística Lucha y Tambo, precisó que la empresa le solicitó una mesa de diálogo, pero que ellos no aceptarán hasta que saquen “un nuevo comunicado aceptando públicamente todo lo que la empresa ya aceptó (en privado)”.

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De momento, el lunes por la tarde Anaí Medrano formalizó la denuncia por el delito de discriminación por parte del personal de Tai-Loy. Previamente, autoridades del Ministerio de Cultura (Mincul) y el Ministerio del Interior (Mininter) se comunicaron con ella para brindarle la orientación legal sobre el derecho a la igualdad y no discriminación y para adoptar las medidas legales pertinentes.

“Se viene realizando el seguimiento respectivo con Indecopi y la Policía Nacional del Perú para el esclarecimiento de la denuncia y, de ser el caso, iniciar las acciones para la sanción correspondiente”, detalló el Mincul. En tanto, el Ministerio del Interior informó a la ciudadanía que, a través de la Central Única de Denuncias, plataforma virtual y telefónica, puede presentar quejas por conductas indebidas del personal policial y del Mininter.

En el marco del Bicentenario, el Ministerio de Cultura instó a reflexionar respecto de las “múltiples maneras en las que se estigmatiza a las personas afrodescendientes” y se comprometió a continua acompañando “a las víctimas en la búsqueda de que estas situaciones cesen”. El Ministerio del Interior se sumó al rechazo a todo acto “discriminatorio y arbitrario”, aunque no hicieron comentarios respecto al trato discriminatorio y humillante que recibió Medrano en la comisaría a la que fue trasladada.

DATO: Si eres víctima de conductas funcionales indebidas policiales puedes presentar tus quejas y denuncias a la línea gratuita 1818, el correo electrónico: denuncias@mininter.gob.pe y el portal web del Mininter.

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