El 29 de diciembre, el Senado deberá ratificar el proyecto que contempla la interrupción del embarazado hasta la semana 14. Mientras, Bolivia reconoce la unión civil entre personas del mismo sexo
La Cámara de Diputados de Argentina aprobó este viernes el proyecto de ley que permite la interrupción voluntaria del embarazo hasta la semana 14 de gestación. La norma, presentada por el Gobierno del presidente de la República, Alberto Fernández, deberá ser ratificada por el Senado argentino para que entre en vigencia.
Después de 20 horas de debate, en el marco del Día Internacional de los Derechos Humanos, fueron 131 votos a favor, 117 en contra y seis abstenciones las que le dijeron sí a regular el aborto libre en la nación. En el 2018, la Cámara de Diputados aprobó el mismo proyecto pero con una cifra menor: 129 a favor, 125 en contra y una abstención.
Ese año, durante la gestión del conservador Mauricio Macri, el Senado rechazó el proyecto por 38 votos en contra y 31 a favor, y mantuvo al país bajo una ley que promulgada en 1921 que permite solo el aborto en caso de violación o riesgo de vida para la gestante. Y, además, pena hasta con cuatro años de cárcel a las mujeres que deciden interrumpir su embarazo.
Los argumentos, en ese momento y ahora, se dividieron entre diputados que sostienen convicciones religiosas y políticas para “defender la vida desde la concepción”, y aquellos que reconocen que se trata de “un problema de salud pública y justicia social” para la mujer y sus derechos.
Las calles, por su parte, se tiñeron de colores verde y azul: pañuelo verde para las ciudadanas, estudiantes, trabajadoras y colectivos a favor de la despenalización del aborto, y azul para quienes se oponen a la medida. Pese al antecedente de 2018, ‘la marea verde’, como se denomina al grupo de mujeres feministas que exigen la reivindicación de los derechos de la mujer, celebró este triunfo entre cánticos y aplausos.
Las cifras
De acuerdo a estimaciones realizadas por el Conicet y Cenep, Centro de Estudios de Población y el Instituto Gino Germani, a solicitud del propio Ministerio de Salud de la Nación, en Argentina se practican un promedio de 460 mil abortos clandestinos cada año. De esa cifra, al menos 40 mil mujeres son hospitalizadas por complicaciones derivadas del procedimiento, y, desde 1983, más de 3 mil ciudadanas fallecieron por hacerlo.
Aunque esta vez el proyecto de ley cuenta con el apoyo del Gobierno y, en la Cámara Alta, el oficialismo tiene 41 de los 72 escaños, no siempre los senadores votan en bloque, por lo que la aprobación de la despenalización del aborto aún es una incógnita. En tanto, la fecha prevista para la votación del Senado es el 29 de diciembre, informó la titular de la Banca de la Mujer, Norma Durango.
De legislarse, Argentina se sumaría a la lista de países de Latinoamérica que permiten el aborto sin condiciones durante las primeras semanas de gestación: Cuba, Uruguay, Guyana, Guyana Francesa, Puerto Rico y el estado de Ciudad de México, en México.
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Derechos Humanos
Un paso más en el reconocimiento y emancipación de los derechos humanos fue el sucedido ayer, 10 de diciembre, en Bolivia. Luego de dos años de disputa administrativa y judicial, David Arequipa y Guido Montaño lograron que el Servicio de Registro Cívico (Sereci) del país reconozca su unión civil como la que cualquier otra pareja.
David Arequipa y Guido Montaño lograron que el Estado boliviano reconozca su unión libre como pareja.
Luego de 10 años de relación, David y Guido decidieron, como ciudadanos conscientes de sus sentimientos y en uso legítimo derecho de su libertad, asistir al Sereci para concretar su unión ante la ley del Estado donde radican. Sin embargo, la institución de registro cívico rechazó el proceso administrativo arguyendo que la legislación boliviana no permite la unión civil entre personas del mismo sexo.
La pareja impugnó esta medida argumentando que, según la Constitución Política del Estado, Bolivia tiene el deber de cumplir con los tratados internacionales sobre Derechos Humanos de los que es parte. Por ejemplo el Pacto de San José que, de acuerdo a opinión consultiva de la Corte Interamericana de DD.HH. “no encuentra motivos para desconocer el vínculo familiar de parejas del mismo sexo”.
En julio de 2020, la Sala Constitucional Segunda del Tribunal Departamental de Justicia de la Paz ya había reconocido la inscripción de la unión de David y Guido a través de una resolución vinculante, por lo que, el Servicio de Registro Cívico tenía que cumplir el fallo. Este hecho marca un precedente a favor de las reivindicaciones de los derechos humanos de la población LGBTI+ en Bolivia y en la región.
En el Perú, por otro lado, el 3 de noviembre el Tribunal Constitucional (TC) rechazó la demanda de amparo interpuesta por el economista Óscar Ugarteche para que se reconozca su matrimonio civil con el mexicano Fidel Aroche, realizado en el país del último. Pese a que la Defensoría del Pueblo instó a los magistrados a cumplir los tratados internacionales en derechos humanos, el TC desestimó por mayoría la medida.
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